Pseudoelecciones 2006

Secuestran por cinco horas al padre de Joaquín Aguilar:

Joaquín Aguilar, víctima del sacerdote Nicolás Aguilar Rivera, ha sufrido en tres ocasiones amenazas o acciones intimidatorias, que buscan frenar la denuncia por "conspiración a la pederastia" que presentó la semana pasada en la Corte Superior de California, Estados Unidos, contra los cardenales Norberto Rivera Carrera y Roger Mahony.
La más reciente involucró a su padre, Julio Aguilar. Los hechos ocurrieron el domingo pasado, cuando fue interceptado y secuestrado por siete sujetos, quienes enviaron un mensaje a su hijo: que deje en paz todo.
De acuerdo con su relato, los secuestradores buscaban que firmara un papel en blanco. Como se negó, sustrajeron documentos del microbús que tripula, los cuales contienen su firma y fotografía.
Ayer al mediodía, acompañado de familiares, entre ellos su hijo, Julio Aguilar presentó la denuncia correspondiente ante la Unidad Investigadora número dos del Ministerio Público, en la delegación Azcapotzalco, cuya averiguación previa quedó registrada con el número de expediente FAZ/AZ-3/T2/01191/06-09.
En la querella quedaron asentados los antecedentes del caso que interpuso Joaquín Aguilar en Estados Unidos.
Joaquín relató que su padre conducía su unidad por avenida Ferrocarriles Nacionales, en esa demarcación, cuando dos autos -un Grand Marquis negro y un Stratus blanco- le cerraron el paso. De ambos vehículos descendieron siete individuos encapuchados, quienes lo secuestraron por cinco horas.
"Lo robaron, lo traían de un lado para otro, recibió amenazas, le dijeron que tenían datos de toda mi familia y que nos están siguiendo, que están muy pendientes de nosotros", recordó el joven denunciante, de 25 años.
Confirmó también el mensaje enviado con su padre: "que ya le baje, porque no les está gustando lo que estamos haciendo".
Joaquín aseguró que su padre fue interrogado sobre su violación en 1994 por parte del Nicolás Aguilar, la demanda que interpuso en México por ese hecho -que no prosperó- y sobre una averiguación previa en Tehuacán, Puebla, presentada por el ataque sexual del mismo cura a otros 60 menores.
"¿Por qué insiste con su caso en la Corte de Los Angeles?", le preguntaron.
Tres agresiones contra la famillia
La familia de la víctima presentó una denuncia de hechos contra quien resulte responsable del secuestro exprés y por las amenazas contra Julio Aguilar. Dado que pretendían que firmara un papel en blanco y se llevaron algunos documentos personales, como la tarjeta de circulación, solicitaron a las autoridades que a partir de ahora "todo papel firmado por la víctima sea sometido a investigación".
Esta es la tercera ocasión en que la familia Aguilar es agredida por la denuncia contra los cardenales de la ciudad de México y Los Angeles, Norberto Rivera y Roger Mahony, respectivamente.
La primera fue el año pasado, luego de que se dio a conocer el intercambio epistolar entre ambos prelados, en el cual se evidencia que el arzobispo primado de México sabía de las prácticas homosexuales del presunto pederasta y de que fue notificado por Mahony de otras agresiones sexuales en la ciudad estadunidense. En esa ocasión el joven recibió amenazas de muerte vía telefónica.
El segundo caso ocurrió el miércoles pasado, cuando agentes del Instituto Nacional de Migración intentaron detener a sus abogados estadunidenses al término de la conferencia de prensa que ofrecieron en un hotel de la capital del país para informar sobre la denuncia interpuesta en Los Angeles. La tercera fue el secuestro exprés de su padre este lunes.
-¿Quién está detrás de lo ocurrido?
-No soy capaz de adjudicarle a nadie lo ocurrido. Evidentemente, tiene que ver con la denuncia que presentamos en California, pero no creo que una institución católica haya sido capaz de llegar a estos extremos.
Aseguró que ningún representante de la Iglesia católica lo ha buscado, aunque rechaza cualquier acuerdo extrajudicial, pues prefiere que todo se dirima en los juzgados. "No responderé a las acusaciones o consideraciones que sobre mí hacen ante los medios de comunicación. El que nada debe, nada teme. Lo más viable tanto para mí, la Iglesia y el cardenal Rivera es que se enfrente la demanda y todo se compruebe allá, en California."
La Red de Sobrevivientes de Víctimas de Abuso Sexual de Sacerdotes rechazó que el secuestro haya sido obra de la Iglesia católica. Quizá se trata de fanáticos religiosos, dijo el vocero del organismo, Eric Barragán.
Sin embargo, planteó que de persistir las agresiones la familia Aguilar podría trasladarse a otra ciudad, donde sea posible garantizar su seguridad.