De la columna de Dinero, una nota-propuesta interesante y una nota chusca... pa´relajar el hígado...

Dinero
Enrique Galván Ochoa

Mínimos vs. máximos
La legislación sobre salarios abusivos
¿Fuego amigo o humareda?
Santander, Banobras

Aparentemente es muy avanzada la legislación que se cocina en el Senado, cuyo fin es evitar que algún funcionario público perciba un sueldo mayor al del presidente de la República (un cuarto de millón de pesos al mes). Se supone que el presidente es el funcionario de mayor jerarquía y ningún otro debe tener un ingreso mayor al suyo. Sin embargo, no es justa esta legislación porque no toma en cuenta la diferencia del sueldo máximo -el presidencial- y el mínimo de los trabajadores. Los señores legisladores deberían aprovechar la ocasión para corregir un abuso que viene cometiéndose desde hace muchos años. El presidente gana ¡236 salarios mínimos al día! Una forma de solventar semejante iniquidad es aumentando el mínimo y disminuyendo el máximo. El mínimo tendría que ser como el que perciben los trabajadores en España, 7 mil pesos mensuales, y el salario presidencial no podría excederlo en más de 20 veces, esto es 140 mil pesos por mes. De otro modo la ley que se cocina en el Senado saldrá coja.

Fuego y humo

Más que ''fuego amigo'' lo que hay en los machucones que el ''doctor honoris burris'', Vicente Fox, ha venido dando a su sucesor con singular entusiasmo -a los que se han sumado Espino y Abascal- podría considerarse ''humo espeso''. Se advierte la mano de la señora Marta -experta en estos menesteres- para desviar la atención de la opinión pública de las cuentas pendientes con la justicia que tienen el laureado ''doctor honoris burris'', así como los muchachos Bribiesca y la propia señora Marta. Muchos mexicanos están esperando que Felipe Calderón se faje los pantalones -aunque sean de talla chica- y les dé un ''tate quieto''.