Rechaza PRD reforma fiscal y presenta su propuesta

LaJornada

Roberto Garduño y Alma Muñoz

Plantea reducir el gasto corriente en 100 mil millones de pesos, no crear mas impuestos y desaparecer regímenes especiales para que paguen los grandes contribuyentes.

México, DF. El Partido de la Revolución Democrática (PRD) en la Cámara de Diputados no ha establecido acuerdo alguno con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) para aprobar la iniciativa de reforma fiscal de Felipe Calderón Hinojosa.

“La rechazaremos tajantemente por regresiva y nos guiaremos únicamente por nuestros estatutos para impulsar cambios que no sean regresivos y no afecten a la mayoría de los mexicanos”, sostuvo Javier González Garza, coordinador del grupo parlamentario en San Lázaro.

Al continuar el Décimo Congreso Nacional Extraordinario perredista, éste votó por unanimidad el rechazo definitivo a la propuesta fiscal de Felipe Calderón, y dio el visto bueno a su agenda legislativa en materia hacendaria.

En el texto destaca la inclusión de los temas hacendarios que se impulsarán durante el próximo período ordinario de sesiones.

Se considera gravar más a quienes más ingresos reciben, a partir de los principios de generalidad y simplicidad; combatir la evasión, omisión y elusión fiscales; liberar las finanzas públicas de su excesiva dependencia de los ingresos petroleros; impedir el IVA al consumo en alimentos y medicinas; mayor peso en ingreso fiscal a la tributación directa; recorte al gasto corriente; mayores potestades tributarias a los gobiernos de los estados y municipios; elevar la eficacia, la transparencia, eficiencia y austeridad en el gasto público.

A tales postulados, Javier González Garza propuso una adición al tema de la reforma fiscal. Por unanimidad fueron aceptados, y contienen los siguientes tres ejes:

“Una política de austeridad del gobierno federal que implicaría una contracción del gasto corriente por 100 mil millones de pesos; no crear nuevos impuestos; la desaparición de los regímenes especiales para que paguen impuestos los grandes contribuyentes; eliminar la discrecionalidad de la Secretaría de Hacienda cancelando los perdones y privilegios fiscales, y que los ingresos resultado de esta medidas se destinen a infraestructura, salud, educación, ciencia y tecnología, desarrollo social y regional”, detalló.

Entre los argumentos para rechazar la propuesta fiscal de Felipe Calderón que González Garza presentó se encuentran que no es una propuesta de reforma hacendaria y es sólo impositiva; no han respondido ni el Congreso ni públicamente a nuestra propuesta; crea nuevos impuestos y no simplifica el sistema fiscal; no se compromete a la orientación y el destino del gasto, e implica serias amenazas al empleo, al no hacer deducibles los salarios y prestaciones de su propuesta.

Por su parte, Juan Guerra Ochoa, encargado de la negociación hacendaria en San Lázaro, advirtió que el PRD debe clarificar ante el gobierno su postura para que los salarios de los trabajadores sean deducibles y que el Régimen de Pequeños Contribuyentes (Repecos) también se elimine de la CETU.

A esto se debe añadir que el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) y las contribuciones al IMSS deben también ser eliminadas de la deducibilidad que propone la administración federal.

“La reforma hacendaria que promueve el PRD busca garantizar el desarrollo económico social sustentable, y se rige bajo el principio de equidad; a mayores ingresos mayor aportación sin excepciones ni distingos”.