México, 7 oct (EFE).- El empresario mexicano Fernando Valdés, dueño de la editorial Plaza y Valdés, donó un taller de tipografía y ofreció trabajo a los reclusos del penal Reclusorio Norte, en los alrededores de Ciudad de México, donde cumplió una condena, se informó hoy.
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Varios diarios mexicanos se hicieron eco de la iniciativa de Valdés, absuelto hace un año del proceso abierto en su contra después de permanecer recluido durante diez meses por el delito de piratería.
"Cuando salí de prisión me comprometí a ayudar a los que se encuentran dentro de este sistema impune, muchos de ellos personas inocentes", señaló el sábado el empresario al visitar la cárcel, según el rotativo Reforma.
La publicación explica que el taller consta de computadoras y maquinaria de impresión, un equipamiento que será manejado por seis reos seleccionados por las autoridades del centro penitenciario por su perfil laboral, sentencia y comportamiento.
Los escogidos serán capacitados en técnicas básicas de edición, manejarán el material de trabajo vía internet y recibirán una remuneración económica que será guardada en un fondo de ahorro al que tendrán acceso cuando salgan de prisión.
Según Reforma, el Reclusorio Norte cuenta con celdas diseñadas para seis personas en las que son hacinadas muchas más, en ocasiones "hasta setenta".
El diario reproduce el testimonio de uno de los elegidos, un médico acusado de fraude, al que identifica como Ricardo, para relatar la problemática carcelaria.
"Cuando entré aquí tuve que aprender a convivir con asesinos, con narcotraficantes, con personas que robaron un refresco, con todos", denunció el reo, que lleva seis meses encarcelado.
Por su parte, el diario Milenio aporta unas declaraciones de Valdés en las que acusa a personal del gobierno del ex presidente Vicente Fox (2000-2006) de haberle recluido para darle "un escarmiento", en venganza por unas denuncias de corrupción que lanzó.
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