Marco Appel y J. Jesús Esquivel
BRUSELAS/WASHINGTON.- El expresidente Vicente Fox vuelve a la escena pública…Y esta vez en el ámbito mundial.
La Internacional Demócrata del Centro (IDC) –organización que agrupa a 100 partidos de tendencia demócrata cristiana de 83 países– podría elegirlo como su presidente durante la “reunión de líderes” que celebrará en Roma el jueves 20 y el viernes 21.
Fox lograría así lo que no pudieron los expresidentes Luis Echeverría y Carlos Salinas de Gortari: ser dirigente de un organismo internacional, pues ambos fracasaron en su intento por encabezar, respectivamente, la Organización de las Naciones Unidas y la Organización Mundial de Comercio.
Más aún: en caso de ganar, el primer acto oficial de Fox como presidente de la IDC será de lujo: ocuparía el lugar de honor durante una “audiencia privada” que el Papa Benedicto XVI ofrecerá a los líderes de esa organización “en su residencia oficial de Castel Gandolfo”, según el programa oficial de la IDC.
Trece días después, el 4 de octubre, la editorial Penguin Group pondrá en circulación en Estados Unidos un libro de Fox: Revolución de la esperanza: la vida, fe y sueños de un presidente de México, en cuyas páginas el exmandatario mexicano –“héroe de la democracia”– “delinea una nueva visión de esperanza para el futuro de las Américas”, según la presentación del libro que aparece en el portal electrónico de la editorial.
“Reunión de líderes”
El jueves 20, Fox presentará en Roma su candidatura formal a la presidencia de la IDC. De hecho, ésta ya era esperada en Europa, luego del intenso cabildeo que el presidente del PAN, Manuel Espino, realizó a su favor entre los partidos de la IDC, en particular con el Partido Popular español, uno de los más influyentes de esta organización.
El pasado 23 de abril, durante una cena en el Hotel Hilton de Estrasburgo, Francia, Fox comunicó a un grupo de 20 importantes eurodiputados del grupo del Partido Popular Europeo (PPE) su intención de “seguir cabalgando”, lo cual los asistentes interpretaron como una señal de que le interesaba ese puesto (Proceso 1591).
Fox cuenta con “altas probabilidades” de ser electo. “Es un personaje conocido internacionalmente, y eso ayuda”, respondió en febrero pasado el secretario ejecutivo de la IDC, el eurodiputado español Antonio López-Isturiz, cuando se le preguntó si Europa apoyaría una eventual candidatura de Fox (Proceso No. 1580).
Ludek Kudlacek, secretario de Relaciones Exteriores de la Unión Demócrata Cristiana de la República Checa, señaló el viernes 14, en entrevista telefónica con este corresponsal, que Fox “era un excelente candidato”, ya que representa “la fuerza de los valores cristianos que todavía tienen gran peso en América Latina”, así como la “defensa de la democracia en esa región frente a la amenaza de los regímenes autoritarios”, en referencia al presidente venezolano Hugo Chávez y el cubano Fidel Castro.
El Partido Popular español es el principal impulsor de Fox. Pero no el único: lo apoyan también la mayoría de los partidos de derecha de los países excomunistas de Europa del Este, que por cuestiones históricas rechazan a los gobiernos cubano y venezolano con los que Fox se enemistó.
Pero en esta contienda Fox no es el único candidato: compite con la peruana Lourdes Flores y el italiano Pier Ferdinando Casini.
De acuerdo con fuentes consultadas por este semanario, la IDC puede elegir a su próximo presidente mediante dos modalidades: por consenso de los partidos que la integran o por votación de los representantes en una “reunión de líderes”, su máximo órgano de decisión.
Pero el sistema de elección que aplica la IDC otorga mayor peso a los votos de los partidos socios más fuertes en sus países, como la Unión Demócrata Cristiana de Alemania, la Unión por un Movimiento Popular de Francia, el Partido Acción Nacional de México (los tres en el gobierno) y el Partido Popular de España, según explica a Proceso Javier Jiménez, vocero de la IDC.
Por lo pronto, la IDC realiza consultas y negociaciones para lograr el consenso en torno a un candidato.
“El sueño americano”
“Vicente Fox encarna el ‘sueño americano’ en su sentido más amplio: el de una visión para el nuevo mundo y para la historia de México.”
La editorial Penguin Group presenta así, en su portal de internet, el libro Revolución de la esperanza: la vida, fe y sueños de un presidente de México, escrito por el expresidente Vicente Fox y por el publirrelacionista y cabildero estadunidense Rob Allyn.
“Electo como un político ajeno a los más altos círculos del poder (en México), con un mensaje de honestidad, cambio y esperanza, él (Fox) es verdaderamente un héroe de la democracia”, enfatiza la editorial en su breve presentación del libro, el cual saldrá a la venta en Estados Unidos el próximo 4 de octubre.
El volumen costará 27 dólares con 95 centavos. Pero ya se puede solicitar en el sitio amazon.com, empresa cibernética que lo vende con 34% de descuento.
La portada del libro muestra una fotografía de Fox, tomada supuestamente en uno de los corredores de su rancho en San Cristóbal, Guanajuato. El expresidente aparece de frente, vestido con un traje color negro, camisa blanca y corbata roja; sonriente ante la cámara y con las manos cruzadas a la altura del vientre.
En su libro “Fox delinea una nueva visión de esperanza para el futuro de las Américas”, destaca la presentación de Penguin Group, de cuya lectura se desprende que está hablando de un hombre que tiene las soluciones para los problemas que enfrenta todo el mundo y no del expresidente de México que prometió resolver en 15 minutos el conflicto zapatista en Chiapas o hacer crecer anualmente la economía mexicana en 7%.
Incluso, con humor involuntario, afirma: “Su presidencia también redujo la pobreza y acometió contra la corrupción”.
En medio de los elogios, la presentación intenta atrapar el interés de los eventuales lectores con un pequeño avance de los misterios que develará el expresidente. Promete: “Por primera vez, Fox revela los altibajos de su cercana pero novata relación con los líderes del mundo, como el presidente George W. Bush, el primer ministro Tony Blair y los mandatarios Fidel Castro, Vladimir Putin y Hugo Chávez”. l
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